El tema es defender el agua

14 Apr, 2021

Por Sofía Castillo (@sofia_xol) y René Moreno (@elperrogacho).
Nota vía Planeteando

Una pensaría que en un desierto se cuidaría y apreciaría el agua como si fuese lo más preciado que tenemos, como si la vida dependiera de ella, porque es evidente que dependemos de ella. Aún así, muchas personas no entendemos el estado crítico en el que nos encontramos. Quizás porque los gobiernos nos han ocultado históricamente la información real sobre la sobreexplotación, contaminación y acaparamiento del agua en nuestro país, o que nos engañaron diciendo que para solucionarlo la estrategia debe ser algo así:

Este desconocimiento genera las condiciones ideales para que, mientras nosotras estamos cerrándole al grifo cuando nos lavamos los dientes; el agua sea sobreexplotada, utilizada despiadadamente y sin remordimiento por las industrias extractivas, el gobierno y la clase política, a costa de nuestra propia vida.

Hablando del conflicto en Chihuahua, el uso político del conflicto por el agua entre los malos gobiernos, la agroindustria y pequeños agricultores no es tema nuevo, pero fue en el 2020 que comenzó a resonar a nivel nacional. Ha sido complejo explicar la problemática porque existen intereses de todos los niveles inmiscuidos, desde las cúpulas políticas y empresariales nacionales e internacionales, hasta los intereses de los pequeños agricultores, sus familias y las comunidades que giran en torno a la agricultura en la región.

Al respecto, uno de los mayores problemas es que la “democracia” se encuentra capturada en nuestro sistema político actual, esto significa que los intereses más cuidados son los de las cúpulas económicas y políticas, como los de la agroindustria de exportación y la clase política que se beneficia de ella (como el PAN, PRI y Morena en el caso de Chihuahua). Lo que significa es que en las decisiones sobre el agua estos grupos son los más beneficiados, mientras que la agricultura para asegurar la soberanía alimentaria de la región es relegada a un segundo término, y mucho peor: las acciones necesarias para evitar una crisis del agua derivada del acaparamiento y la sobreexplotación queda en ultimísimo término.

La militarización del agua en Chihuahua llevó al límite el conflicto e inició un cambio radical a nivel nacional en la estrategia gubernamental de administración hídrica que a largo plazo afectará a todos los territorios y comunidades en defensa del agua. Después de la primera represión por parte de los elementos de la Guardia Nacional, se publicó un decreto federal para “establecer la utilidad pública de los recursos hídricos como un asunto de seguridad nacional”. Así comienza (oficialmente) la militarización del conflicto en nuestro territorio, lo preocupante es que el decreto abre la puerta a la posibilidad que estas estrategias de militarización para la “protección de los recursos hídricos cómo asunto de seguridad nacional”, o sea un asunto militar, sean utilizadas en cualquier otro conflicto relacionado a la defensa del agua en nuestro país, no solamente en Chihuahua.

Además, la crisis del agua en Chihuahua se está agravando considerablemente por la sobreexplotación de los acuíferos, de 61 acuíferos que existen en este territorio 29 se encuentran sobre explotados, este ha sido el máximo histórico desde que la @conagua_mx lleva estadística del tema. Prácticamente se duplicó el número de acuíferos donde @conagua_mx considera que se extrae más agua de la que el acuífero puede recargar.

Para nosotras, es muy importante diferenciar la defensa del agua, del territorio y de la vida, de la defensa que hacen las cúpulas económicas y políticas del riego de cultivos que necesitan altas cantidades de agua en medio de un semi-desierto (esto debe terminar) y que son parte del problema (modelo extractivista y agroindustria).

En el contexto de crisis climática en el que nos encontramos, es URGENTE evitar la sobreexplotación, contaminación y acaparamiento del agua a manos de estas cúpulas económicas y políticas, y en específico a manos  de las industrias agricolas, del fracking, mineras, cerveceras y refresqueras, responsables de la contaminación, sobreexplotación y estrés hídrico en Chihuahua y México.

Resulta urgente recuperar nuestras cuencas, para hacerlo debemos tomar acciones concretas y sostenidas para restaurarlas y regresar los ríos a su cauce; así como obligar a que se desmantele el modelo actual de extractivismo del agua que ha demostrado ser insostenible y profundamente dañino, que violenta derechos humanos, propicia conflictos socioambientales y agresiones en contra de las personas defensoras del medio ambiente.

Resulta urgente que sepamos que la defensa del agua #DependeDeNosotras las personas y que es importante que continuemos fortaleciendo nuestras redes y estrategias comunitarias, de participación ciudadana y democracia directa para la defensa del agua, así cómo exigir colectivamente y con urgencia una Ley Nacional de Aguas que garantice el derecho humano al agua como bien común y que en caso de conflicto vele por los intereses de las personas comunes, las comunidades, pueblos y ecosistemas y no por los intereses de las mega-industrias y la clase política (principios pro homine y pro naturaleza).

POR ÚLTIMO, es importantísimo que no sucumbamos ante la idea del futuro perdido. La crisis climática es sobre todas las cosas una crisis de imaginación y de esperanza.

Al día de hoy existen, existimos, cientos de personas y comunidades en todos los rincones organizándonos para evitar las guerras por el agua (únanse, nos necesitamos), cómo las cientos de personas en Mexicali defendiendo el agua frente a la industria cervecera; la digna y rebelde Ayutla, la Temacapulín en defensa incansable de su Río Santiago; los pueblos dignos de Sonora a 6 años del derrame tóxico de Grupo México continúan en lucha por la recuperación de los ríos, los Pueblos en defensa de la vida y las cientos de personas defensoras del medio ambiente, de los cerros y de los bosques en la Sierra Madre Occidental y en todo el país.

Estamos aquí y lograremos que el agua vuelva a su cauce.

Mientras los partidos hacen campaña y nos hacen promesas vacías, capturados por los intereses de capitalistas y contaminantes, vamos a defender la vida,

#ElTemaMX es recuperar el agua, al bosque, a los ríos, a la vida misma y su dignidad para todas las personas.